¿Cómo gestionar el estrés laboral?
Desde la experta opinión de la doctora Mariana Gutiérrez Mariscal, del Instituto de Biotecnología de la UNAM, el estrés debe regularse a partir del conocimiento de cómo se origina y cuáles son sus consecuencias.
Conocer lo que te pasa y cómo ocurre, te da cierta capacidad de poder controlar y hacer algo al respecto. Para ello te comentamos los 4 pasos que te ayudarán a gestionar más eficientemente el estrés.
Paso 1. Comprende la bioquímica
¿Sabías que existen por lo menos dos tipos de estrés que te afectan diferentemente al cuerpo?
El estrés físico
Al ser una amenaza que pone en peligro la supervivencia, el organismo entra en un desequilibrio en su funcionamiento, y que este puede causar desde fiebres hasta hemorragias.
El estrés emocional
Puede generar síntomas físicos como emocionales, tales como: depresión, ansiedad, tics, tensión en el cuerpo, insomnio, entre otros. Este tipo de estrés puede dañar a corto plazo y matar a largo plazo.
La reacción natural de nuestro cerebro, en general, ante el estrés y la presión es secretar una serie de hormonas, principalmente el cortisol, que preparen al sistema nervioso para generar una respuesta que asegure su supervivencia: quedarse a la expectativa o huir de la amenaza. Y prepara al cuerpo para esta respuesta de supervivencia: la respiración es más corta y rápida, para que los músculos se llenen de sangre, la visión periférica desaparece, se suprimen: la digestión, las actividades reproductivas y comienza a entrar la desesperación y el estrés.
Una parte del cerebro, la amígdala, se encarga de decidir la respuesta hormonal y conductual del organismo. Selecciona la información que se almacenará de esta situación, para que cuando suceda algo similar, se haga uso de esta información sensorial, mientras ocurre la situación amenazante.
Cuando una de las respuestas es no huir, el cerebro y el cuerpo, al no estar de acuerdo crean una situación de desesperación y bloqueo.
Paso 2. Etiqueta las emociones
Jon Parlett, pionero en el uso de la neurociencia y en la formación de líderes, asegura que mantener cualquier situación estresante bajo control puede ser mucho más sencillo si a las emociones se les coloca nombre y etiqueta.
Según la Escuela de Postgrado de Psicología y Psiquiatría, dentro de los beneficios de reconocer las emociones se encuentran.
Tomar mejores decisiones
Tener autocontrol
Entender las situaciones y como suceden de forma real
Atender a nuestras necesidades y bienestar, mejorando así nuestra calidad de vida, entre otras.
Herramientas vitales, que nos van a permitir destacarnos en cualquier puesto de trabajo y en nuestra vida en particular.
Al reconocer nuestras emociones y entender con claridad lo que sucede a nuestro alrededor desde una perspectiva neutra, entonces podremos reeducar a nuestro cerebro a reaccionar de forma distinta ante el estrés y otras circunstancias de la vida.
Paso 3. Reduce tu respiración
Realizar varias respiraciones profundas y lentas, permite que el oxígeno llegue a los pulmones y a la sangre. Esta forma de respirar permite informarle al cerebro y al cuerpo que ya no es necesario aumentar la intensidad de la reacción de huida o lucha, que nuestra vida no está en peligro y que se pueden bajar los niveles de cortisol, adrenalina y otras hormonas que nos preparaban para defender nuestra existencia de un peligro real.
En este proceso de respiración puedes acompañarte de esencias o fragancias que te permitan relajarte también, los olores de lavanda, melisa, la chamomila o la bergamota pueden ser excelentes alternativas.
Paso 4. Re-etiqueta tus emociones
Una vez que haz logrado interrumpir el ciclo de presión y estrés de manera orgánica, es importante darte un momento para re etiquetar tus emociones, y cuál es su probable causa. Por ejemplo:
La frustración, me siento incapaz de cumplir con mis obligaciones, porque son muchas, porque me faltan algunas herramientas para lograrlo, etc.
También es importante evaluar lo bueno de nuestras emociones.
Siguiendo con el ejemplo: ¿Qué puedo hacer para no sentirme frustrada?, ¿Qué estrategias, técnicas, trucos necesito implementar en mis actividades que me faciliten cumplir con mis obligaciones?, ¿Qué ayuda necesito para cumplir con mis obligaciones?, etc.
Conclusiones
Nuestra respuesta emocional, es un termómetro que nos permite conocer y entender cómo nuestro cerebro y cuerpo están respondiendo a los estímulos externos.
Es muy importante poner atención a nuestras respuestas emocionales. En el ámbito laboral, existen muchos estímulos externos que pueden generar muchos sentimientos de enojo, frustración, agotamiento, desesperación, etc. Y nuestra forma de responder ante ellos, nos habla de nuestra salud mental.
Si ves que tus respuestas emocionales son muy intensas, exageradas o que tus emociones te desbordan, acude a un especialista de la salud física y mental. En Solux te recomendamos hacer citas constantes con médicos, psicólogos o psiquiatras, para mantener tu estado de salud mental óptimo y puedas tener una vida feliz y plena.
Bibliografía
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https://estres_que_pasa_en_el_cerebro.unam.mx/leer/249/Estres_que_pasa_en_el_cerebro#:~:text=%E2%80%9CCuando%20estamos%20en%20situaci%C3%B3n%20de,respuesta%20que%20asegure%20la%20supervivencia.%E2%80%9D
Managment, Alto Nivel. (18 de agosto de 2014). Neurociencia en 4 pasos para controlar tu estrés. Obtenido de Alto Nivel, Sitio web:
https://www.altonivel.com.mx/44686-neurocienciza-el-secreto-contra-el-estres-laboral/
Escuela de Postgrado en Psicología y Psiquiatría, (21 de junio de 2021) La importancia de identificar emociones. Obtenido de Escuela de Postgrado en Psicología y Psiquiatría:
